Susto, mucho susto hemos pasado los madrileños que circulábamos por las carreteras de Madrid sobre las cuatro de la tarde, ya que una fuerte granizada ha sacudido la capital y las localidades colindantes.
En mi caso, que conducía por la M-40, a la altura de los recintos de IFEMA, el caos se ha apoderado de los conductores en ambos sentidos. Los automovilistas se han parado en medio de la carretera y han intentado apartarse en el arcén para guarecerse de los granizos que como canicas caían en ese momento. El estruendo dentro de los coches era total y temíamos que se rompieran las lunas de los vehículos. Al salir de la M-40 a la altura del Comité Olímpico, por la calle Arequipa, una riada de agua recibía a los estupefactos conductores y los coches más que andar por la carretera navegaban.
La M-40 se ha cortado a la altura del kilómetro 12.800, en lo que fuentes de Emergencias Madrid han calificado como la epicentro de la tormenta.
La fuerte granizada ha hecho que la circulación quedase cortada también en la M-11, a la altura de kilómetro y en la M-30, donde varios vehículos han parado bajo los puentes a refugiarse ante el volumen del granizo.
El Metro también se ha visto afectado, al suspenderse la circulación en la línea 7 entre las estaciones de Cartagena y Las Musas por la acumulación de agua procedente del exterior a través de los pozos de respiración.
Los bomberos de Madrid han realizado 33 salidas desde las 15:30 hasta las 17:30, sobre todo en barrios de San Blas, Hortaleza, Fuencarral, Ciudad Lineal y Moncloa, debido a pequeñas inundaciones, roturas de tabiques y caídas de ramas.
Por el momento se desconocen las incidencias que la granizada ha podido causar, aunque fuentes de la Policía aseguran que hay algunos garajes anegados.
La AEMET prevé que se produzcan más precipitaciones hasta la medianoche.
About José Luis García
Periodista con más de 25 años de experiencia, especializado en información local, inmigración, sanitaria y deportiva.