Lo de esta campaña electoral empieza a ser esperpéntico. Yo casi ya prefiero que hagan un Gran Hermano Very Important Politics o así y me pongan a todos los candidatos juntitos a ver quién hace la chorrada más gorda o se le ocurre optar por el edredoning para asegurarse un aliado y llevarse el gato al agua. Que metan también a Belén Esteban y Kiko Rivera, para dinamizar y atraer al espectador alérgico a los políticos. Total, probablemente tendría muchíiiisimos más seguidores este formato que los debates-ladrillo que está programando Telemadrid.
Uno se cree que ya lo ha visto todo, y resulta que no. Tenemos a una protoalcaldesa popular, que si bien ya es mundialmente conocida desde los tiempos en que siendo ministra de Cultura alababa a Sara Mago, y que se ha ganado el título de Loca del Cajero para unir al de condesa, no ceja y lo mismo se marca un chotis en inglés que se pasea con un sillón hinchable bajo el brazo. Y que constantemente rectifica y pide perdón por sus meteduras de pata, sin que al parecer, haga demasiada mella en sus votantes.
Ahora le ha salido competidor con el socialista Antonio Miguel Carmona. Este va a llegar a la meta desfondado y con el poco –o mucho- crédito perdido a base de quemarse también en los medios haciendo tontás. Ahora me paseo en silla de ruedas, ahora doy saltitos delante del oso y el madroño, ahora me desgañito cantando como si fuera Frank Sinatra despeinado… sus momentos estelares ya circulan por la red con blog propio, en el que han quedado bastante perdidas sus pimpán-propuestas.
Los de UPyD se van de cañas con los vecinos –habría que ver quién las paga, porque se han gastado toda la pasta de campaña en demandas- y como te descuides, se te puede meter en el taxi David Ortega de rondón para decirte que él no usa coche oficial. Claro, siempre que el taxi no lleve publicidad de Esperanza Aguirre… O lo mismo te cruzas con Ramón Marcos en el Metro, mientras tú te preguntas “¿ Y quién es este tipo chiquitín que me está pegando un speech a estas horas??”
Pero el no va más, por el momento, es lo del alcalde de Getafe. Juan Soler, miembro del PP más recalcitrante del Barrio de Salamanca y aspirante a repetir al frente de este municipio aunque sea por bilocación (porque está más en Madrid que en el pueblo que dirige). El sujeto está repartiendo condones con su carita y el lema Sensibilidad y Eficacia. Con dos cojones. Parece ser que incluso los reparten en las dependencias de servicios sociales de Getafe, debe ser para no perdérselo ver la cara de los chavales que llegan allí a pedir información y les largan un condón con la jeta del alcalde. Yo es que no acabo de pillar el mensaje: ¿te la voy a calzar pero con precaución? ¿No te preocupes que no te voy a hacer un pequeño pepero? ¿Qué lo mío no se contagia aunque me votes? Yo quiero conocer al jefe de campaña de Juan Soler, qué crack!
About Maria Tello
Periodista con más de 20 años de experiencia en información política y local de Madrid. Apasionada de la lectura y la historia.