Beto. El guardameta portugués del Sevilla fue el hombre de la Final Ibérica de Turín. Dos manos prodigiosas en la tanda de penaltis. Cardozo y Rodrigo pincharon en hueso ante el luso. Como Maxi Pereira y de nuevo Rodrigo en el tiempo de prolongación del primer tiempo. Y otra mano milagrosa a seis minutos del final tras un gran disparo de Lima. Reflejos y poderes de un superhéroe. De sus manos salían las telas de araña a semejanza de Spiderman. 60 segundos después, una salida por uvas casi provocó que Garay anotara, pero la suerte le acompañó en sus borrones. El balón se marchó fuera por poquito. En el minuto 14, otra cantada del meta por alto, tuvo a Nico Pareja como Ángel de la Guarda, pues sacó el balón de la línea tras otro remate de Garay. Beto, una bendición para el Sevilla. Una maldición para el Benfica.
Fueron 122 minutos intensos. Dos horas de emoción. Con alternativas. Sin goles, pero un partidazo. Por parte del Sevilla. Por parte del Benfica. Un canto al fútbol. No fue extraño que los futbolistas acabasen fundidos. Tirados en el suelo. Comprometidos. Lo dieron todo. Pero solo podía haber un vencedor. Tercera Europa League para el Sevilla en los últimos ocho años. El mismo número de finales europeas que lleva perdidas el Benfica. La maldición de Belo Guttmann sigue. Llantos entre sus seguidores. Lágrimas en los jugadores y en su técnico Jorge Jesús. No valen los títulos honoríficos, pero las ‘águilas’ anoche lo fueron. El pasillo que le hizo el Sevilla antes de subir a recoger las medallas fue sentido y merecido.
El Benfica tuvo sus opciones. Sus momentos para llevarse la final. En los últimos minutos del primer tiempo y en el arranque del segundo tiempo. Rodrigo tuvo el gol tras recortar a Beto, pero en su camino se cruzó Pareja. Lima lo intentó a renglón seguido. Dos ocasiones en una. Los desajustes del Sevilla provocaron unos instantes de caos. En especial, Alberto Moreno. Fuera de sitio. No supo medir. Perdió balones absurdos. Hizo un penalti a Lima, que por suerte para el Sevilla, no lo vio ni el árbitro ni el juez de área. Una vez más, su presencia es testimonial. Nunca ven nada punible. Un coladero el lateral que figura en la lista de 30 para el Mundial. Pero Emery le mantuvo. Jugó con fuego. Moreno tardó una hora en hacer algo positivo tras cruzarse ante Lima. En los laterales fue donde flaqueó el cuadro hispalense. Coke fue más extremo, y por ahí, dejaron una autopista para el Benfica.
Pero el Sevilla tiene un jugadorazo. Cada vez que Rakitic tocaba el balón, el equipo portugués temblaba. Y el Sevilla levitaba. El croata dibujó varios pases con la escuadra y el cartabón. Increíble el del minuto 100 le puso una a Bacca en la primera parte de la prórroga que pudo haber sido el primer gol, pero el colombiano se hinchó al meter con demasía el exterior del pie. Fue el dandy del partido. Por su parte, Carriço y M´Bia pusieron la entrega. El esfuerzo. Los kilómetros. Y atrás, Fazio y Pareja, un máster de corte y anticipación.
Hubo que resolver el trofeo en la lotería de los penaltis. Sí, Beto hizo su trabajo con dos paradas en cuatro lanzamientos. Como Bacca, M’Bia, Coke y Gameiro. Los cuatro lanzaron cuatro mísiles. Imparables para Oblak. El Sevilla volvió a cumplir la máxima de que las finales se juegan para ganarlas. Tercera Europa League. Como el Inter, Juventus y Liverpool. El himno del Arrebato sonó con fuerza y emoción en Turín. El Sevilla espera rival para el 12 de agosto en Cardiff: Real Madrid o Atlético por la Supercopa de Europa.
SEVILLA: Beto, Cole, Fazio, Pareja, Alberto Moreno; Carriço, M´Bia; Rakitic, Reyes (Matko Marin 78’) (Gameiro 104’), Vitolo y Bacca.
BENFICA: Oblak; Maxi Pereira, Luizao, Garay, Siqueira (Cardozo 98’); A, Gomes, Amorin; Sulejmani (Almeida 24’), Gaitán (Cavaleiro 103’); Rodrigo y Lima.
ÁRBITRO: Félix Brych (Alemán). Mostró amarilla a Fazio (10), Alberto Moreno (11’), Siqueira (30’), Coke (99’) y Almeida (100’).
PENALTIS: 1-0. Lina (gol);1-1 Bacca (gol), Cardozo (para Beto),1-2 M´Bia (gol),Rodrigo (para Betio) 1-3 Coke (gol),2-3 Luizao (gol), 2-4 Gameiro (gol).
INCIDENCIAS: Juventus Stadium. Final de la Europa League. 33.100 espectadores. Sobraron 7.ooo localidades que no fueron ocupadas.
About Francisco J. Molina Quirós
Desde 1988 ligado al periodismo deportivo, pero me encanta escribir sobre lo que me rodea.