Quedan diez meses para las próximas elecciones autonómicas y municipales y la carrera por hacerse con la alcaldía y la Comunidad de Madrid empieza a entrar en su fase última.
El diputado autonómico Antonio Miguel Carmona ha confirmado que optará a las primarias del PSOE por la alcaldía de Madrid, con lo que se suma al sociólogo Enrique del Olmo.
Por su parte, el PP todavía está deshojando quiénes serán los candidatos para los dos puestos clave en Madrid. Se escuchan rumores como el que la ‘lideresa’ Esperanza Aguirre querría ser la alcaldesa de Madrid, pero tiene otras competidores, especialmente mujeres, como la delegada del Gobierno Cristina Cifuentes e, incluso, la vicepresidenta del Gobierno de Rajoy, Soraya Sainz de Santamaría.
Mientras tanto Izquierda Unida quiere abanderar el proyecto de la izquierda junto con otras formaciones minoritarias bajo el lema ‘Ganemos Madrid’ donde quiere que se integre la sorprendente y pujante formación Podemos de Pablo Iglesias.
Ante semejante panorama sólo nos queda decir que pobres madrileños. ¿Por qué la alcaldía y la comunidad más importante de España tiene que estar regida por estos políticos? Quizás porque llevamos dos años con un presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, que era más conocido en sus círculos del PP (por no decir en su casa) que por los madrileños, y por una alcaldesa cuyo mérito es ser la mujer del expresidente Aznar -recordemos que ninguno de los dos se presentó a las elecciones como cabeza de lista, pero los dos accedieron a los cargos tras las huidas de Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón- y los madrileños han soportado y tragado lo impensable. Sí, hasta los más acérrimos del PP se han dado cuenta que tras un cuarto de siglo al frente de las instituciones madrileñas con estos candidatos no se pue ir a ninguna parte. Botella, por lo menos –o por la presiones- ha anunciado que no se va a presentar, pero ¿qué pasa con González?
Si a eso unimos que el otro gran partido de Madrid (PSM-PSOE) más parece la trama de ‘Juegos de Tronos’ con un rey como Tomás González que se quiere blindar en el cargo por muchas primarias que haya y unos candidatos ávidos por ser ‘la mano del rey’ y tocar poder, nos encontramos ante un panorama desolador.
¿Cuál es la solución? ¿El conglomerado que quiere montar IU o el emergente Podemos?
Como diría un creyente, ¡que Dios nos asista!
Menos mal que este viernes llega Arnold Schwarzenegger a la capital para ser nombrado embajador del Turismo de Madrid en el mundo. A lo mejor también se podría sumar al circo y postularse como candidato. Experiencia de gobierno no le falta, ya que ha sido gobernador de California, pero seguro que los madrileños disfrutaríamos más si tuviera a todos estos políticos enfrente y les dijera aquella frase mítica de “sayonara baby”. Que tranquilidad para todos los madrileños.
About José Luis García
Periodista con más de 25 años de experiencia, especializado en información local, inmigración, sanitaria y deportiva.