Madrid fue el pasado sábado testigo de una de las más emotivas y numerosas manifestaciones por los derechos de los animales esas con la fuerza de la razón y con la convicción de que se puede detener un crimen, porque en 72 horas morirá otro animal inocente, y otra vez, con la complicidad del PP y PSOE.
Su desprecio por la vida permitirá que en Tordesillas se cubra otra vez de tierra la sangre, ignorando que tanta crueldad y dolor han vuelto a sumir a España en la oscuridad y vergüenza más profunda. Un toro de apenas seis años será perseguido por una multitud sorda y enardecida y su formidable cuerpo será desgarrado por decenas de lanzas. ‘Elegido’ sufrirá una agonía atroz hasta morir Nada justifica la violencia hacia los animales. Estamos cansados de argumentos miserables y despropósitos
Desde hace diez años, el PACMA lucha en el ámbito nacional e internacional por la abolición de este festejo. Años de múltiples acciones y eventos, campañas de difusión y de denuncias, porque no descansaremos hasta conseguirlo. El pasado mes de junio, el Parlamento Europeo ha admitido en trámite la solicitud del Partido Animalista para investigar y acabar con un espectáculo inmoral que incumple la normativa Autonómica de Castilla y León y el Artículo 13 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea. Es más que una excelente noticia
Como también lo es ver una sociedad tomando conciencia ante la ignominia de esta celebración que espantada e indignada suma cada vez más voces pidiendo su desaparición. Sin duda, nos queda camino por delante, pero con todo, ahora es posible anunciar que éste es el principio del fin. De todas las regiones han venido personas a denunciar que los políticos permanecen impasibles y en silencio porque quieren y que en los pueblos de nuestro país se torturan y matan animales porque se puede, así de claro y así de cruel. Han venido para exigir al PP y PSOE, los auténticos responsables que detengan esta barbarie y para pedir a Europa que interceda, porque todos los gobiernos de España han dado la espalda al maltrato animal.
Desafiando la ignorancia, niños de personas en pie y de otra forma pacífica están dispuestas a vencer la brutalidad de un acto imposible ya en el siglo XXI. Y han renovado su compromiso de continuar y ganar. Que a nadie le quepa la menor duda. Esto es imparable. Porque hay un deuda con el futuro y no es posible permitir que pase una sola generación más sin ver la abolición del Toro de la Vega.
Amanda Luis Alemán. Médico de profesión, forma parte de PACMA desde sus inicios. En los últimos años ha sido coordinadora de la Comunidad Autonómica de Canarias y actualmente es miembro de la Junta directiva del Partido Animalista.