Ya tenemos los cuartos del Mundial. Brasil-Colombia y Alemania-Francia, por un lado del cuadro. Y por el otro, Argentina-Bélgica y Holanda-Costa Rica. Cuatro representantes hispanoamericanos y otros tantos europeos. De los ocho, solo tres han llegado por la vía rápida, mientras que otros tantos tuvieron que renovar el pasaporte mundialista en la prórroga, y dos, Brasil y Costa Rica debieron apurar a la lotería de los penaltis. Ocho selecciones que han dejado buenas sensaciones y también incógnitas.
Brasil llega a estas alturas de la película con mucha presión en la cabeza y más plomo en las botas. La ‘canarinha’ ha mostrado un juego reservón, sin brillo, especulativo. Lejos de su filosofía. Solo Neymar aporta frescura y dosis de improvisación. Mucha medianía en el elenco brasileño: Paulinho, Fred, Jo. Su pareja de centrales y guardameta, lo más fiable. Antes de llegar a Maracaná le esperan dos finales de aúpa. Primero, ante la emergente Colombia, una de las tres sensaciones del Mundial. Los de Pekerman han mostrado el fútbol más vistoso, liderados por James Rodríguez, el máximo goleador de la cita mundialista con cinco goles. Descaro y mentalidad ofensiva, sus avales. Habrá que ver las pulsaciones de sus futbolistas ante selecciones de más empaque y pedigrí. Ante Brasil parten como favoritos, a no ser que sean los anfitriones los que se adelanten en el marcador, pues en este escenario, Scolari ha copiado a la perfección la patente europea para enfriar los partidos.
Al que siga adelante le espera un duro hueso de roer: Alemania o Francia. Dos formaciones con un gran equilibrio de músculo y talento. Puede que sea la eliminatoria de cuartos más igualada. De medio campo para arriba mucha imaginación: Kroos, Özil y Gótze, mientras que Müller, Klose y Schürrle ponen los goles. Los teutones han sembrado dudas tras sus partidos ante Ghana y Argelia, pero su fiabilidad en los grandes momentos es su mejor respuesta, aunque su zaga formada por Mustafi, Mertersacker, Boateng y Howedes tendrá la prueba del algodón frente a los Benzema, Giroud y Valbuena. Una selección que ha mostrado una gran superioridad en la zona ancha con Matuidi y Pogba, y que ha evidenciado una gran fortaleza y efectividad en las acciones a balón parado y al contragolpe.
Por el otro lado, la Holanda de Van Gaal, construida con muy buenos cimientos se encomendará en su triángulo mágico: Sneijder- Robeen-Van Persie. Como Costa Rica a Keylor Navas. Los ‘ticos’, la segunda sensación del Mundial 2014, afrontan los cuartos sin ninguna presión y con el incentivo de seguir disfrutando y alargar su leyenda. Resistir las embestidas de la ‘oranje’ y esperar una genialidad de Bryan Ruiz y a un arranque de potencia de Joel Campbell, las armas de los chicos de Pinto.
Por su parte, en el Argentina-Bélgica asistiremos a otro duelo de alto voltaje. Messi, sin estar al cien por cien, puede decantar un partido en cualquier momento. El azulgrana, secundado por Di María, el jugador con más desborde en la actualidad , son las mejores cartas de presentación de los de Sabella. Los argentinos no han enamorado con su fútbol, pero su espíritu competitivo les hace ser favoritos frente a una Bélgica muy interesante en su esqueleto. Courtois, está de dulce: Kompany, en un gran momento de madurez y con un excelso Hazard, el jugador con más talento en Brasil, y bien secundado por De Bruyne y Maertens, que ponen más chispa y un Lukaku que añade el ingrediente de la potencia. En el debe de sus jugadores les puede pesar las horas de vuelo en citas trascendentales. Los belgas son la tercera sensación en tierras brasileñas. El corazón me dicta una final Colombia-Bélgica y la cabeza Francia-Holanda.
About Francisco J. Molina Quirós
Desde 1988 ligado al periodismo deportivo, pero me encanta escribir sobre lo que me rodea.