El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado que los funcionarios recuperen las prestaciones de la acción social, suspendidas transitoriamente en 2012, y que los madrileños se beneficien de nuevas rebajas fiscales, entre ellas la desaparición de la tasa de basuras. La revisión, en la que se incluye las previsiones a cierre de este ejercicio y la evolución prevista hasta 2022, de las magnitudes presupuestarias principales, había sido aprobada en la Junta de Gobierno de carácter extraordinario celebrada el pasado lunes. Decir que no se plantean adoptar medidas nuevas, salvo las citadas, y se mantienen activas la práctica totalidad de las existentes en el Plan de Ajuste.
Esta revisión es la traducción de los buenos resultados obtenidos por la política de austeridad y racionalización del gasto emprendida hace dos años y el traslado de sus beneficios tanto a empleados públicos como a los ciudadanos. De ahí que, además de la eliminación de la mencionada tasa de basuras, no se vaya a actualizar en un 2%, previsión del IPC, los tipos y tarifas de las tasas y precios públicos municipales.
Incidencia de las medidas fiscales en el bolsillo ciudadano
Ya este año los ciudadanos sentirán la reducción de la tasa de basuras en un 12 %, que supone que la vivienda media pasará a pagar 48 euros en lugar de los 54 del pasado año. En el próximo ejercicio, desaparece la tasa, tal como anunció la alcaldesa.
A partir de julio de este año se restablecen los beneficios fiscales para las herencias en el impuesto sobre la plusvalía municipal, eliminándose el requisito de que el heredero hubiera convivido con el fallecido para poder optar a la bonificación. También se adaptarán las bonificaciones del impuesto a la nueva ponencia de valores para poder incrementar las mismas.
El próximo ejercicio, además de la supresión de la Tasa de basuras, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, se verá minorado en un 10%.
Será en 2016 cuando el 70% de los inmuebles verán reducido en un 9% de media el IBI, ya que a la rebaja del Ayuntamiento se unirá la desaparición del recargo transitorio del Gobierno. En el 30% restante la reducción media será del 5%.
Dentro de tres años, en 2017, y en los ejercicios siguientes, se congelara el recibo de este impuesto a niveles de 2014. Para ello se reducirá el tipo general del impuesto en la cuantía necesaria para neutralizar el efecto derivado del incremento del IBI que resulte de la ponencia de valores. Es decir, no se actualiza el tipo del IBI ni tan siquiera para equipararlo a la subida del IPC. Esto supone de hecho una rebaja adicional por importe similar al crecimiento del coste de la vida.
La revisión del Plan de Ajuste incluye también la adhesión automática al punto general de entrada de facturas de la Administración General del Estado; la adhesión automática a la plataforma Emprende en 3, prevista por el Gobierno central para impulsar y agilizar los trámites para el inicio de la actividad empresarial. Finalmente, se han sustituido las autorizaciones y licencias e inicio de actividad económica por declaraciones responsable.
