No salimos de una y ya estamos metidos en otra. Si hace pocos días saltaba la bomba informativa con la detección de Francisco Granados, ex consejero y ex secretario general del PP de Madrid, junto a unos varios alcaldes del sur de la Comunidad en la denominada ‘Operación púnica’, hoy mismo agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) han detenido a tres personas en la provincia de Jaén –entre quienes figuran un concejal del PP en La Carolina– en el marco de la ‘Operación Enredadera’, que la Benemérita está desarrollando desde primeras horas de la mañana en las provincias de Sevilla, Córdoba, Huelva, Cádiz, Granada, Badajoz, Madrid, Valencia, Zaragoza, Barcelona, Lanzarote y Las Palmas de Gran Canaria, además de en el territorio jiennense.
Desde UCO han precisado que las personas detenidas son «un teniente de alcalde de La Carolina, un jefe del servicio de Infraestructuras de la Diputación Provincial y un técnico de Fomento».
A esta noticia hay que añadir que dos personas más han sido detenidas este martes en la capital aragonesa dentro de ‘operación Enredadera’. Se trata de un trabajador del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) en Zaragoza, y de otro, ya jubilado.
Los detenidos en la capital aragonesa son J.A.G.P., empleado de ADIF, y de M.A.M.T., ya jubilado se ha producido por la supuesta adjudicación de contratos de forma irregular.
Esta nueva operación que ha puesto en marcha la Guardia Civil contra la corrupción afecta a numerosas provincias españolas, a raíz de que los investigadores del Instituto Armado descubriesen que la empresa Fitonovo había creado una «red de contactos con funcionarios corruptos» que les facilitaban la obtención de contratos públicos de forma irregular.
Fitonovo es una de las empresas con las que mantenía relaciones el que fuera director del área de Vía Pública del Ayuntamiento de Sevilla, Domingo Enrique Castaño, cuyo patrimonio personal ascendió de manera considerable y sin justificar después del concurso público para la adquisición de un derecho de opción de compra de terrenos de Mercasevilla SA, según ha explicado la Guardia Civil.
Del informe patrimonial realizado sobre esta persona se dedujo que había recibido de la sociedad Fitonovo múltiples dádivas o regalos de distinta naturaleza (dinero, vehículos). Esto ya provocó que en julio y diciembre de 2013 ya se iniciasen nuevas investigaciones, registros y detenciones, entre otros, de responsables de esta empresa.
Del análisis de la información incautada en aquella investigación la Guardia Civil ha averiguado que la dirección de Fitonovo había creado una infraestructura destinada a obtener contratos públicos irregulares, «habilitando la estructura de la empresa para conformar una red de contactos con funcionarios corruptos» que les facilitaban dicha contratación. A su vez crearon una contabilidad paralela que se nutría de facturación falsa para, entre otros fines, pagar sobornos a funcionarios y responsables públicos.
A los detenidos e imputados en esta operación se les acusa de haber cometido presuntamente delitos contra la Administración Pública, blanqueo de capitales, alteración de precio en concurso y subasta pública, falsedad en documento mercantil, delitos contra la Hacienda Pública y organización criminal.