'Caso Futre': el austríaco Ogris, el posible fichaje frustrado de Gil del Español en el 91

Andreas Ogris, delantero austríaco

Paulo Futre no responde al estereotipo de estrella. No se le subió en ningún momento la fama a la cabeza. Y mucho menos después de su retirada. Un tipo noble e íntegro. Lo fácil para él hubiese sido ir por su cuenta, aislarse del resto del vestuario, pero todo lo contrario. Llevó los galones de la capitanía en toda su extensión y se comprometió desde el minuto 1 con todos los compañeros que tuvo en el Atlético. Sonadas fueron sus discursiones con Jesús Gil, mientras que el resto permanecía callado y presenciaba el intercambio de lindezas que uno y otro se decían. Hasta que apareció Roberto Solozábal que secundó al luso en sus contra réplicas al presidente colchonero.

El pasado domingo, el diario ‘Record’ de Portugal publicó una entrevista con Futre en las que dijo que “Jesús Gil nos pidió perder ante el Español”. Muchos pensaron que al ex capitán rojiblanco se le le había ido la olla. No tenía ningún sentido sacar 23 años después un asunto en el que su interlocutor no podía dar su versión al haber fallecido. Como también, Luis Aragonés, que era parte implicada pues por entonces, dirigió al Español, en el que fue su último partido, pues ya se había comprometido con el Atlético para sustituir a Tomislav Ivic. De hecho, Gil le ofreció unas semanas después al de Hortaleza que se sentara en el banquillo rojiblanco en la semifinal de Copa ante el Barcelona, pero el técnico se negó y le recordó al mandatario que su trabajo comenzaba a partir del 1 de julio.

“Paulo, no podemos ganar. Díselo a tus compañeros. Diles que no corran”, se ratifica Futre en su versión de los hechos antes del Español-Atlético que cerraba la temporada 1990-91. El portugués lo cuenta en una carta publicada en MARCA. “Yo no daba crédito a lo que estaba diciendo mi presidente y le pregunté: ¿Qué dice? ¿Por qué? Porque tengo un negocio con el Español”.

Gil hablaba de la posible llegada de un refuerzo desde las filas ‘pericas’. El mandatario trató el traspaso de Atkinson con la Real Sociedad, pero el club donostiarra se negó a abordarlo. El austríaco Andreas Ogris entró en la órbita colchonera. El delantero de 27 años había llegado esa campaña al Español que desembolsó 100 millones de las antiguas pesetas por su cesión y se aseguró una opción de compra por 250 millones en las dos siguientes temporadas. Por tanto, el club de Sarriá, por entonces, tenía prioridad por el futbolista, pero no estaba dispuesto a abonar esa cantidad. De hecho, el punta retornó a su país al término de aquella temporada.

“Luis ha hablado conmigo y se ha interesado por mi futuro. Para mí ha sido como un padre”, me confesó Ogris por aquel entonces y que salió publicado en dicho rotativo el 9.de junio de 1991, el día antes del partido. Ogris estaba en Viena pues fue baja para aquel partido al encontrarse lesionado en su rodilla izquierda. Al día siguiente, Luis Aragonés, desmintió que hubiese hablado con el Atlético de jugadores y que la opción Ogris se hubiese planteado. Pero ya se sabe que reconocer un posible fichaje podía y puede encarecerlo. Incluso a Gerhard Rodax, compatriota de Ogris, al que presuntamente iba a sustituirle en el Atlético no le sorprendió el interés rojiblanco por su compañero. «Sabía que esa opción era factible pues se publicó en Austria», aseguró el mismo día.

Futre tampoco pudo jugar aquel partido por una lesión en una rodilla. Un choque en el que el Atlético no se jugaba nada, pues desde había varias semanas se había proclamado subcampeón de Liga tras el Barça, mientras que el Español se jugaba no entrar en la promoción por la permanencia. Bueno, hay que hacer un matiz. 23 años después se ha sabido que el Atlético se jugaba una prima que le llegó de un tercero. Solozábal y Alfaro lo han reconocido, pero no han desvelado la identidad del equipo. Mallorca y Zaragoza se jugaban disputar la promoción (finalmente lo harían los aragoneses junto con el Cádiz).