Bienvenida a la Tierra Cristina

La Infanta Cristina, que seguirá siéndolo a pesar de que pueda ser condenada (otra cosa es que renuncie a sus derechos de sucesión, pero Infanta siempre lo será) ya ha debido digerir el mal trago que supuso convertirse en un ser humano más que habita la tierra, en este caso en España, al ser imputada por un posible delito. No así sus abogados, Miquel Roca y Jesús María Silva, que con lo que seguro que cobran no se explican que el juez del caso Nóos haya rechazado su recurso contra el auto que la envía a juicio, y lo atribuyen a que José Castro ve más relevante la posición de Manos Limpias que la doctrina del Tribunal Supremo (TS), en alusión implícita a la doctrina Botín, que el magistrado no ha hecho valer en este caso.Urdangarín y cristina

En declaraciones a la puerta de su despacho, Roca ha anunciado que no presentarán recurso de queja porque no quieren que se interprete como maniobra dilatoria, y considera «insólita» la postura del juez, porque es el primer caso en que se acusa a alguien de presunto delito fiscal en contra de la opinión del Ministerio Fiscal y de la Abogacía del Estado, que ejerce de acusación particular.

Jesús María Silva ha afirmado: «El objetivo de nuestro recurso se ha conseguido: la constatación de que el juez de instrucción se alinea con Manos Limpias» en vez de con el Ministerio Fiscal y de la Abogacía del Estado.  Ha añadido que Castro se aleja de la jurisprudencia del TS, del Constitucional (TC) y de «la doctrina de todas las audiencias –provinciales– que se han pronunciado sobre el tema».

Silva sostiene que el auto del juez no responde a las cuestiones jurídicas que ellos plantearon en su recurso, y critica que se limite a hacerse eco «de la opinión de un colega, un catedrático y de unos votos particulares». «Cada uno que llegue a la conclusión que quiera llegar. Pero esta es la constatación que queríamos conseguir, y ya es pública y notoria para toda la opinión jurídica de España», ha dicho.

En referencia al contenido de la resolución judicial, en la que Castro acusó a los abogados de la Infanta de mentir respecto a la doctrina Botín, Roca rechaza entrar en ese debate: «No vamos a convertir un tema muy serio en un debate personal entre el abogado y el juez».

 Al preguntársele si la Infanta se arrepiente de su actuación, ha defendido que no sabe de qué debería retractarse -«Los inocentes no se arrepienten»- y se ha negado a contestar a los periodistas si ella se arrepiente de confiar en su marido, Iñaki Urdangarin, al considerar que es una pregunta improcedente.

A lo mejor es que hasta que no tenga un fallo condenatorio del Juez, Cristina no se da cuenta verdaderamente que no está por encima del bien y del mal por haber nacido en la familia de los Borbones, en cuyo hipotético caso debería decir : “Houston tenemos un problema”.

About José Luis García

Periodista con más de 25 años de experiencia, especializado en información local, inmigración, sanitaria y deportiva.

Escribir un Comentario